10.- Equipo de trabajo de 5 personas,
investigar mitos sobre sexualidad, verdades, banderines falso y verdadero para
cada participante. (Listado de 30 mitos o verdades, o más a criterio).
MITOS Y
REALIDADES SOBRE LA SEXUALIDAD
ØLa mujer nunca
queda embarazada en la primera relación sexual.
Mito:
este es uno de los mitos más comunes y perniciosos que lleva a los adolescentes
a cometer muchos errores. Si durante la relación sexual la mujer está fértil,
puede producirse el embarazo sin importar que sea la primera, la segunda o la
última relación sexual.
ØEl
tener relaciones sexuales de pie impide el embarazo.
Mito:
este es otro mito frecuente. La posición en que se tenga la relación sexual no
afecta las posibilidades de no embarazarse. Basta que la mujer esté en su
período fértil para que la posibilidad de embarazarse si tiene relaciones
sexuales esté presente.
Ø Los varones,
para ser más hombres, necesitan tener muchas relaciones sexuales.
Mito:
la hombría no está dada por la cantidad de veces que se ha acostado con una mujer, ni por la cantidad
de mujeres que tenga “disponible”. La hombría se mide por la responsabilidad y
respeto con que el hombre vive su sexualidad, reconociendo en ella un valor y
logrando una actitud de cuidado y valoración de ella. Un “verdadero hombre” es
quien es capaz de respetar a la mujer y respetarse a sí mismo entendiendo la
relación sexual como un acto de intimidad, amor y respeto mutuo.
Ø A
las mujeres que han tenido relaciones sexuales se les arquean las piernas.
Mito:
el haber tenido relaciones sexuales no provoca ningún cambio físico en la
mujer, ni en el hombre. Por lo tanto no es posible “saber” si una mujer ha
tenido o no relaciones sexuales a través de su estructura física.
Los
hombres pueden expresar sus emociones y afectos frente a los demás.
Realidad:
los hombres no sólo tienen el derecho, sino que son capaces de expresar y
manifestar sus emociones y afectos con naturalidad. Ellos, al igual que las
mujeres, tienen la capacidad de ser sensibles y afectuosos. Muchas veces ellos
reciben mensajes de la familia, la escuela, los medios de comunicación, que les
impiden desarrollar esta capacidad. Es necesario superar estos mensajes para
poder desarrollar todas las capacidades que tienen como seres humanos.
Ø El
lavado vaginal después de la relación sexual es un método eficaz para evitar el
embarazo.
Mito:
el lavarse después de haber tenido relaciones sexuales o el tomar agüitas de
hierba, no evita la posibilidad de que ocurra un embarazo. Los métodos
efectivos para evitar el embarazo se basan en datos y técnicas científicamente
probadas y que la pareja debe conocer antes de tener la relación sexual.
Ø Cuidarse “por
las fechas” (método del calendario) no es recomendable para evitar el embarazo.
Realidad:
dado que la mujer puede tener ciclos más largos o más cortos, el cuidarse por
las fechas se considera muy arriesgado pues ella no puede anticipar si su ciclo
va a ser regular y exacto de 28 días. Cualquier variación en él, echa por
tierra todos los cálculos de fechas que se hayan podido hacer.
Ø Durante la
menstruación la mujer no debe practicar deportes, o lavarse el pelo, porque si
lo hace se le puede cortar la regla.
Mito: durante
su menstruación, o regla, la mujer puede realizar todas las actividades que
desee en forma normal y natural. Los cuidados que ella deberá tener tienen que
ver con mantener su higiene personal, por lo que el bañarse, lavarse el pelo,
etc. Durante la regla son acciones recomendadas. Sólo en caso de que sienta
molestias específicas, puede disminuir la actividad deportiva y tomar algún
analgésico.
Ø Las eyaculaciones
o emisiones nocturnas son absolutamente normales en los varones.
Realidad:
a partir del fin de la pubertad (13-14 años aproximadamente) es natural que los
muchachos tengan eyaculaciones espontáneas durante los sueños. Esto es un signo
que habla de la maduración sexual-biológica que están experimentando. Esta
experiencia se relaciona con el inicio de la menstruación, en la caso de las
muchachas. Ambas situaciones indican que muchachos y muchachas han logrado un
desarrollo biológico que les da la capacidad de reproducirse.
Sin embargo, cabe aclarar que la capacidad para hacerse responsables de poder
procrear no se limita sólo a lo biológico, sino que requiere de una maduración
psicológica, social y valórica, que permita asumir la responsabilidad que
implica la maternidad y paternidad.
Ø La falta de
himen en la mujer es la prueba de que ella ya no es virgen.
Mito: el himen
es una membrana muy delgada y frágil que se encuentra a la entrada de la vagina
de la mujer. El que una mujer no lo tenga o se le haya perforado no es un signo
de que ella ya haya tenido relaciones sexuales. Un ejercicio físico, una
maniobra brusca o un accidente pueden hacer que se rompa; también hay mujeres
que tienen el himen perforado desde su nacimiento y nunca han tenido relaciones
sexuales. La mujer debe valorar y cuidar su sexualidad más allá de los mitos
que existan en torno a ella.
Ø Si la mujer no
sangra en su primera relación sexual, quiere decir que no es virgen.
Mito:
el sangrado durante la primera relación sexual tampoco es un signo de
virginidad. Si ha habido una buena estimulación y lubricación vaginal en los
momentos previos a la penetración, no tendría por qué haber sangrado ni dolor
de ningún tipo. Esto podría llegar a ocurrir cuando no ha habido una buena
preparación y estimulación, produciéndose algún tipo de sangrado o dolor
producto del roce o de la tensión con que se esté viviendo la relación sexual.
Ø El embarazo
precoz afecta la posibilidad de los adolescentes de mejorar sus condiciones
educativa, económica y social.
Realidad: está
comprobado que un embarazo durante la adolescencia afecta las posibilidades de
que la mujer, y el varón cuando lo asume, logren desarrollar todas sus
potencialidades en el ámbito de lo educativo, del desarrollo social y su
capacidad para lograr la independencia económica.
Ello implica la interrupción de un proceso de crecimiento y desarrollo y el
poder proyectarse en la vida, poniéndose metas, apropiadas a la edad, que les
permitan realizarse en la vida adulta. Está claro que, desde todo punto de
vista, no es recomendable la experiencia de un embarazo durante la
adolescencia, sin embargo, si ello ocurre se deberá velar por acoger la vida
del niño o niña que está por nacer y procurar que los padres adolescentes
cuenten con el apoyo económico y afectivo para poder asumir con responsabilidad
su maternidad y paternidad.
ØEs
común que durante la adolescencia se acceda a “dar la prueba de amor”, por
miedo a ser abandonados por la pareja.
Realidad: con
frecuencia los adolescentes declaran haber tenido relaciones sexuales porque
“si no lo hacía mi pareja me dejaría”, o bien porque los demás iban a pensar de
que no era suficientemente hombre o mujer, o porque todos en el grupo lo han
hecho “y no podía quedarme atrás”.
Todas estas son ideas que lejos de permitir que los adolescentes
puedan valorar y vivir su sexualidad de forma integral, los empujan a responder
a los miedos y las presiones de otros.
Lo recomendable es que ellos puedan vivir la sexualidad en la pareja dentro de
un proceso de conocimiento y comunicación mutua sobre las inquietudes, las
sensaciones y expresiones del cariño y amor que se tienen, junto con sus
valores y decisiones sobre cómo enfrentar el tema de las relaciones sexuales.
Ø Todo contacto
físico con la pareja lleva necesariamente a la relación sexual.
Mito:
el contacto físico es algo esencial entre los seres humanos. Besarse,
abrazarse, etc. forman parte de la relación normal de cualquier pareja y no
necesariamente es provocador de una relación sexual. La posibilidad de tener
una relación sexual está dada por la intención o deseo de uno o ambos miembros
de la pareja, cuando se da un ambiente más íntimo que propicia el deseo sexual.
Si la pareja es consciente de ello, podrá darse cuenta de cuáles son los
momentos, lugares o situaciones en que ellos están más proclives a que se dé la
relación sexual, y cuáles no. De esta manera podrán manejar la situación.
Ø El embarazarse
no sirve para mejorar la relación de pareja.
Realidad:
muchas veces las adolescentes creen que si se embarazan el pololo no las va a
dejar, o va a ser más cariñoso y atento con ellas, etc. La verdad es que no es
a través de un embarazo que la relación vaya a mejorar o se puedan conseguir
los cambios que se desean en el otro. Para ello se necesita que la pareja
converse acerca de sus necesidades de afecto, de las formas de demostrarse el
cariño y enfrente las dificultades que pueda estar viviendo, aún si esto lleve
a terminar el pololo. En este caso, el embarazo, lejos de unir a la pareja,
puede transformarse en una situación de angustia y dolor que provoque el efecto
que se desea evitar, e involucre injustamente a un tercero –el hijo o hija que
estaría por venir- en un ambiente de sufrimiento y tensión.
Ø El VIH-SIDA se
contagia sólo si se tiene relaciones sexuales con homosexuales o prostitutas.
Mito:
cualquier persona que sea portadora del VIH (virus de inmunodeficiencia humana)
lo puede transmitir a otra a través de la relación sexual, a través del intercambio
de sangre por medio de una jeringa que contiene sangre de un portador o
portadora, a través de la placenta de la madre portadora, etc. La posibilidad
de transmitir el virus no tiene que ver ni con la condición social, la
situación económica, la orientación sexual u otro; basta que la persona tenga
alguna práctica de riesgo para que ello pueda ocurrir.
Ø Hoy en día
hombres y mujeres pueden compartir las tareas domésticas y fuera del hogar.
Realidad:
hombres y mujeres somos diferentes en cuanto a características físicas y
biológicas: el cuerpo, el embarazo, algunas características de la personalidad,
etc. Pero no nos diferenciamos en cuanto a lo que somos capaces de hacer. Una
de las capacidades y desafíos más fascinantes del ser hombre y mujer tiene que
ver con el poder complementarnos. Por lo tanto en la vida cotidiana, en el
quehacer diario hombres y mujeres podemos asumir distintas tareas de manera
conjunta y en un espíritu de mutua colaboración. El que los varones realicen
tareas domésticas no los hace menos hombrecillos; en ese mismo sentido, el que
las mujeres tengan puestos de trabajo directivos o realicen labores que
tradicionalmente han sido asignadas a los hombres, no las hace menos femeninas.
16.- En la escala del 1 al 10 declara
que tanto va contigo ceder a tener relaciones sexuales por presión o para
reafirmar un noviazgo (PRUEBA DE AMOR).
1, porque la verdad
esas pruebas de amor no existen, hay muchas mujeres que ceden y aceptan darle a
su novio la prueba de amor, y cuando estas salen embarazadas ellos se burlan de
ellas diciéndoles que maduren, para la próxima, y que es una tonta haber
aceptado esa propuesta tan tonta que lo único que trae son consecuencias en la
vida de las personas, en especial en las mujeres.
17.- ¿Crees que la
orientación sexual se adquiere, se aprende, o se nace con ella?
Para mí la orientación
sexual se aprende y se adquiere, pero solo si aportamos un granito de nosotros
para aprender y adquirir información que puede ser importante para nuestra
vida, y que nos puede ayudar con nuestro desarrollo cuando queramos formar una
familia y tener un conocimiento sano para vivir bien y poder compartir con
nuestra pareja momentos inolvidables.
18.- En la escala del 1
al 10 que tanto te preocupa tu figura corporal por cuestiones de estética o de
“quedar bien” con el sexo opuesto.
2, no me preocupa mi
figura para nada ya que para mí lo importante es que todos los seres humanos
Dios no hizo a su imagen y semejanza y es por eso que todos somos perfectos, y
no necesitamos de cirugías, y no me importa lo que piense mi pareja opuesta, la
verdad me tiene sin cuidado su opinión.
19.-¿Qué
tanto te preocupa independizarte económicamente para llegar a tener pareja o
tener una vida sexual autónoma?
Me preocupa bastante ya que si mi pareja
y yo no nos lleguemos a entender, podamos tener consecuencias en la situación económica
y amorosa que llevemos los dos y esto puede hacer que la relación no se dé como
debe ser.
20.- ¿Qué
tanto sabes sobre las visitas al médico para prevención y cuidado del cuerpo,
la salud según tu género? ¿Tienes cartilla de salud? Tienes vacuna puesta de
VPH (en caso de mujeres).
No sé mucho pero si lo
suficiente para defenderme en el caso de alguna enfermedad de transmisión
sexual, y la vacuna del VPH si la tengo, me la aplicaron hace un año y medio
aproximadamente.